jueves, septiembre 14, 2006

Truffaut, Godard, Marker y los franceses

No sabía qué película comentar de las tres que he visto en las últimas veinticuatro horas, así que tomaré el camino intermedio, porque tienen bastantes cosas en común, como que son francesas y próximas a la Nouvelle Vague.



Primero he entrado de lleno en el Chris Marker más puro con su obra maestra Sans soleil, de la cual recomiendo la crítica de Tren de sombras y Miradas. No tengo más que añadir a eso. La película es imagen y memoria, fascinante de principio a fin. Y me quedo con un detalle: la genial aproximación a Vertigo, la peli de Hitchcock, que me lleva a pensar en otro gran homenaje que le hizo Terry Gilliam en 12 monos, que a su vez era un remake de La Jetée, del propio Marker... Curioso, ¿verdad?

Después me las vi con el penúltimo Truffaut que me quedaba, "El amante del amor", que no comencé con demasiadas expectativas debido a algunas cosas que había escuchado. La verdad es que la película tiene altibajos, pero está rodada con una ternura y una comprensión de los personajes admirables. Tiene momentos extraordinarios, y el fantasma de la misoginia que planea durante buena parte del metraje acaba dando la vuelta y demostrándonos que todo está en las personas...

Por último tocó Alphaville, o Lemmy contra Alphaville, del siempre polémico J. L. Godard. Hay que decir que es, de las que he visto, su película más narrativa accesible al gran público (sin olvidar que es Godard, claro). Se trata de una extraña mezcla de cine negro (desde el principio se aprecia la perenne sombra de Hammet) y ciencia ficción, aunque resulta algo extraño ver el futuro como si fueran los años 60 (en cuanto a vestuario, decorados y demás). Además, tenemos las cosas de Godard, siempre interesantes: innumerables citas cinéfilas (Nosferatu), literarias (Paul Eluard), de cultura popular (Dick Tracy, Flash Gordon), disgresiones surrealistas, diálogos líricos y filosóficos, y experimentales juegos de luces (maravillosa secuencia en el hotel). Y aquí resaltar otra cosa. Truffaut realizaría dos años después Farenheit 451. Godard siempre fue el cerebro y Truffaut el corazón de la Nouvelle Vague. En Alphaville se consigue la alienación de la persona mediante restricciones emocionales (llorar equivale a ser condenado a muerte) que conducen a la anulación intelectual. En Farenheit ocurre al contrario, la censura intelectual de la prohibición de libros transforma a los habitantes en seres asépticos, sin emociones. ¿Dos maneras diferentes de llegar al mismo lugar? ¿Por qué Godard elige la supresión emocional y Truffaut la intelectual? ¿No sería más lógico lo contrario?



En fin, he estado pensando y creo que Francia tiene el mayor número de grandes directores de la historia del cine.

-Hermanos Lumière
-George Meliès
-Jean Vigo
-Abel Gance
-Marcel Pagnol
-Jean Renoir
-René Clair
-Marcel Carné
-Jean Cocteau
-Julian Duvivier
-Jacques Tati
-Jacques Becker
-H. G. Clouzot
-René Clement
-Robert Bresson
-Max Ophüls (éste de adopción)
-François Truffaut
-Jean LUc Godard
-Eric Rohmer
-Claude Chabrol
-Jacques Rivette
-Alan Resnais
-Jacques Demy
-Agnès Varda
-Chris Marker
-Louis Malle
-Jean-Pierre Melville
-Claude Sautet
-Jean Eustache
-Maurice Pialat
-Philip Garrel
-André Techiné
-Bertrand Tavernier
-Leos Carax
-Erick Zonca
-Robert Guediguian
-Patrice Leconte
-Olivier Assayas
-Laurent Cantet
-Arnaud Desplechin
-Claire Denis


Y me dejo muchos muchos en el tintero (unos sin querer, otros a propósito...) ¿Alguien da más? ¿Cuál sería vuestro pódium? Yo creo que me quedaría con Bresson, Rohmer y Truffaut, sin ningún orden, y en el banquillo Godard y "los breves": Eustache y Vigo... Pero está difícil...

18 comentarios:

HieronymusMerkin dijo...

Hola! De las pelís que has comentado solo he visto "Alphaville", que me gustó bastante. No se porque, pero en algo me recordó a "2046" (quizás en la melancolica visión del futuro en algunos pasajes). Me temo que esta es una película de la que alguno dirá que ha envejecido mal. Sinceramente, este film tiene tanto puntos positivos a su favor que no creo que se haya producido tal envejecimiento (¿se podría decir lo mismo, por ejemplo, de "la naranja mecánica"?).
Por otra parte, me gustaría señalar que "L´Atalante" de Jean Vigo es una de las películas mas bellas que haya visto nunca.
La verdad es que, como dijera Dreyer, Paris es el cine. Y, por extensión, Francia es la tierra de promisión del séptimo arte.
Lo único que lamento es que en los últimos tiempos haya surgido cierto estilo que trata de asimilar el cine francés al típico cine americano. A la mente se me viene Luc Besson, cuyas películas no son malas en absolutas, pero se aleja demasiado de la exceltente tradición francesa. Pero bueno, los tiempos cambian, y supongo que es lógico que estos fenómenos se produzcan.

Por cierto, excelente blog!

HieronymusMerkin dijo...

Por cierto, por si quereis echar un vistazo:

www.elcuchilloenelagua@hotmail.com

Daniel Quinn dijo...

Gracias Hieron!!

Antes que nada voy a poner bien tu polanskiano blog, que has hecho un cruce muy original pero poco efectivo, jeje:

http://www.elcuchilloenelagua.blogspot.com/

No era muy difícil de adivinar :P.
Me acabo de pasar y tiene muy buena pinta, así que ahora te enlazaré, y luego me paso a leerlo con más calma.

Lo que dices de los franceses es verdad, por eso he obviado subrepticiamente a gente como Luc Besson. La diferencia es que allí compaginan el cine más comercial y más Hollywoodiense (que dá un poco de pena, porque es todavía peor que el de Hollywood, yo creo) con autores mucho más alternativos y al margen de los cánones. Al margen de los viejos rockeros (nuevaoleros y posteriores) tenemos a los que he mencionado: Denis, Desplechin, Cantet, Assayas y los más comerciales y quizás más cuestionables Jeunet, Ozon, Jaoui o Kassovitz. Y no hay que olvidar que en Francia se han refugiado algunos de los grandes en los últimos tiempo, como Kieslowsky...

Saludos!!

Roberto A. O. dijo...

Aunque "Lemmy contra Alphaville" sea una de mis pelis favoritas de Godard, y hay otros títulos franceses que me encantan, no soy un gran seguidor de su filmografía. Obviamente tienen grandes maestros con multitud de obras maestras, pero donde estén Ford, Hawks, Walsh, DeMille, Curtiz, Vidor, Boetticher, esos grandes narradores norteamericanos.

En cuanto al podio, yo me quedo con Renoir, Bresson y Carne. Todos los demás están lejos(en mi opinión of course). El cine de Tati no ha envejecido demasiado bien, y bueno, me gustan Cocteau, Ophüls, Melville, y Truffaut y Godard algo menos. El resto los disfruto poco y con cuentagotas (Rohmer me resulta un tanto insoportable...jejeje), y de muchos no he visto nada....no da tiempo a ver de todo, desgraciadamente.

Saludos

Portnoy dijo...

Alain Resnais y Jean Renoir finalistas... para la tercera plaza habría muchos, pero creo que esos dos son podio indiscutible.
Si incluyes a Kieslowsky también deberías incluir a Haneke, ¿no?

(Ah, y de acuerdo, algunos son comerciales, pero ya le gustaría a muchos directores españoles hacer películas como las hacen los que citas, Jeunet, Ozon, Jaoui o Kassovitz, junto a Besson... por cierto, ya sé que muchos la consideran un bodrio, pero me gustaría saber cuantos directores en el mundo se hubiesen atrevido a hacer lo que hizo Jeunet con la cuarta entrega de Alien. Quizás Del Toro, pero pocos más)
Un saludo.

Anónimo dijo...

El amente del amor es una película muy irregular, bunoe tampoco he visto mucho truffaut pero tienes toda la razón en lo que dices... sube y baja constantemente. Aun así al final transmite ese deje, ese sabor... ese dolor

Un saludo!

Anónimo dijo...

La foto de "Sans soleil" me ha llamado mucho la atención. Ya buscaré más datos y a ver si la consigo.

Por cierto, yo prefiero mil veces a Truffaut antes que a Godard. Como decía el gran Billy Wilder, "Comprendo sin dificultad por qué Godard ha podido por sí solo exterminar varias empresas productoras."

Saludos!

Daniel Quinn dijo...

Roberto, yo siempre he sido fan del cine americano, pero de los que nombras sólo Ford, y Hawks en alguna ocasión, me llegan tanto como lo hacen los francesitos. Al que no soporto es a DeMille, jeje. Sabía que Renoir iba a ser una de las elecciones mayoritarias, y con toda justicia. Me alegra que menciones a Carné, porque se le tiene bastante olvidado, y siempre se le supedita a la labor de Prevért, como si él no tuviera culpa de sus grandes obras... Lo único que me entristece es que no te guste "ver crecer la hierba", espero que no te haya oído la señorita Maud :P (Y me has dado ganas de montarme un ciclo Boetticher-Scott, jeje).

Ya sabía de tu adoración por Resnais, Portnoy, no hay más que entrar en tu blog :P. Yo tengo una mala experiencia con él: creo que lo intenté demasiado pronto, hace ya unos años, con Hiroshima y Marienbad, y me resultó tan absolutamente soporífero que le tomé manía y no volví a ver nada de él. Pero eso tengo que arreglarlo próximamente. Lo que me fastidia es conocer ya sus dos grandes obras...
Respecto a lo de Haneke, así es, deberíamos incluirlo en los adoptados, y también al algún otro como Raoul Ruiz (¿sabes algo de cómo está su adaptación de Proust?, porque podría ser interesante). Y respecto a la cuarta de Alien no la he visto, pero me has despertado curiosidad...

Iban, yo creo que la peli me dejó buen sabor de boca porque no me esperaba gran cosa, había escuchado cosas demasiado terribles de ella, jeje, y tiene cosas muy interesantes. El afán de completitud me llevó a verla..., ya sólo me queda El diario de Adela H., que la tengo lista para un día de estos, aunque..., qué pena pensar que no tendré ningún nuevo Truffaut...

Marnie!! Yo a Godard he aprendido a apreciarlo en los últimos tiempos (creo que desde que vi Banda aparte), pero Truffaut siempre será muy especial. Desde luego, para un momento de bajón o de necesidades básicas siempre me quedaría con la exquisita sensibilidad de François.
Y cómo osas mencionar a Wilder en un post de la Nouvelle vague!! Si fue su fundador apócrifo cuando hizo aquello de Curvas peligrosas, jejeje. Se entera Godard y la tenemos montada :P. Por cierto, tenemos una horas litroneras...

Saludos y muchas gracias a todos!!

PD: uff, me acabo de dar cuenta de que he dejado a Ophuls fuera del podium..., eso no puede ser..., pero bueno, como es de los adoptados no lo cuento, jeje.

HieronymusMerkin dijo...

La frase de que ver las pelis de Rohmer es como ver crecer la hierba... de quien era? La he leido, pero ahora no recuerdo quien la dijo.
A mi Rohmer me parece un maestro colosal. "La Coleccionista" es increible. No he tenido la oportunidad de ver muchas de él (Cuento de Invierno, Cuento de Otoño,La rodilla de Clara, Pauline en la playa y La Coleccionista), pero desde luego me parece un director con una sensibilidad tremenda. A un neofito en la materia no le va a gustar, mucho me temo, porque el "tempo", el ritmo de sus películas es tan sosegado, que puede incluso extrañar. Pero creo que lo que hace es fotografiar la vida, la realidad, y a esa foto le añade lirismo, cierta poesía y elegancia, pero de una forma muy sutil,casi imperceptible.

Hablar de los directores franceses es un "no acabar", porque cada uno aporta cosas nuevas. Y lo que no da Godard, por ejemplo, lo da Truffaut.
Por otra parte, no son incompatibles el amor hacia el cine frances y hacia los grandes maestros norteamericanos. De hecho, si algo le debemos a los directores de la Nouvelle Vague, es que reivindicaran valientemente la figura de directores norteamericanos o que desarrollaron allí gran parte de su carrera, como Hitchcock (recordemos la verenación que sentía Truffaut por su obra. También es interesante recordar como en una tertulia entre criticos y entendidos franceses (no recuerdo el año, pero creo que era en los albores de la nueva ola), Chabrol realizó una encendida defensa de la etapa americana de Hitchcock frente a su etapa inglesa), Ford, Griffith, etc,etc.
El buen cine debe ser apreciado, independientemente de su nacionalidad y de sus orientaciones estéticas. Porque, por ejemplo, entre Dreyer y Fellini, no ha muchas similitudes, pero, sin embargo, son dos de los mas grandes genios que nos ha dado el cine.


Un saludo a todos!

Hieronymus Merkin.

Roberto A. O. dijo...

Obviamente aquí no se trata de denostar a unos y elevar a otros. Lo que está claro es que a todos nos gusta el buen cine, provenga de donde provenga, pero es inevitable que surjan las preferencias. Es decir, yo se que tengo que ver "pelis" de Rohmer para opinar de él (y tampoco he visto muchas, los cuatro cuentos, "Pauline" y "La rodilla de Clara"), pero te digo que si me das a elegir entre una del francés y un western de Hawks o una de piratas de Curtiz, me quedo con la segunda opcion. Son películas que me llaman, mientras a las otras las tengo que llamar yo (sic). De Rohmer me molesta su exceso de retorica, esos planos fijos donde sus burgueses no paran de hablar constantemente; no es un cine que me apasione demasiado, aunque reconozca sus virtudes.

Carné es uno de esos cineastas que caen en el olvido, pero es fundamental para comprender todo lo que vino despues. Algunas películas suyas son un tanto innaccesibles pero merecen la pena.

En cuanto a Haneke, Kieslowski y compañía, no los metamos en el saco...jajaja, que sino, digo que Chaplin es norteamericano..jeje.

Un saludos

HieronymusMerkin dijo...

Evidentemente, cada cual tiene sus gustos y sobre eso la discusión carece de sentido. Cada uno tiene sus preferencias, y benditas sean.
El cine norteamericano tiene, habitualmente, un sello característico que lo hace, en cierta manera, mas "espectacular", y quizás más "fácil" (con perdón) para el espectador. Eso no significa en absoluto que sea un cine peor, o menos artístico. Simplemente es una cuestión de estilo.

Creo que fue Garci el que, hablando de las diferencias entre el cine americano y el europeo, puso el siguiente ejemplo:

Supongamos que un hombre esta en su habitación con su mujer, y esta tratando de anudarse bien la corbata, pero tiene dificultades para hacerlo.
En una película europea él le diría a ella: -Cariño, puedes ayudarme a anudarme bien la corbata.
En una película americana él le diría a ella: -Cariño, puedes echarme una mano con esto.

Por tradición, se entiende que el cine europeo es, quizás, mas poético, más reflexivo que el americano. Solo hay que señalar a Bergman, Dreyer, Pasolini, Resnais...para verlo. También podría decirse que el cine europeo prescinde con mucha mas facilidad del "Mac Guffin".

P.D. Discúlpeseme por la licencia de utilizar el término palomitero "Pelís" para referirme a las obras de Rohmer.

Daniel Quinn dijo...

Pues la famosa frase de crecer la hierba es una película de Arthur Penn que no he visto: "La noche se mueve", donde intervenía Gene Hackman. Sin embargo, en algunos sitios he leído que le adjudican la frase: "es como ver un cuadro secarse". Así que hasta que no la vea no sabré si realmente se pronuncia la primera, la segunda, o ninguna de ellas, jeje.
Está claro que el buen cine puede surgir en cualquier parte, pero resaltaba Francia como un país con una coyuntura que quizás haya favorecido la aparición de genios. Sin embargo, esto es extrapolable a otras épocas y otras artes. Pienso, por ejemplo, en literatura, en los grandes narradores del siglo XIX: Balzac, Flaubert, Stendhal, Chateubriand, Victor Hugo...

Jejeje, de acuerdo Roberto, dejamos fuera a los adoptados, Ophüls incluído, porque si los tuviéramos en cuenta saldrían ganando los americanos... :P
Pese a todo, qué grande es la diversidad; afortunadamente podemos disfrutar de cines muy variados y todos ellos de gran calidad.

En lo de que el cine americano en general es más fácil..., bueno, es posible, pero con mucha cautela... Podríamos hacer comparaciones Asterix y Obélix versus Mulholland drive y cosas así, jeje (ya sé que es trampa, es comparar cine palomitero de un lado con el de autor de otro, pero por esa razón creo que debemos comparar en los mismos niveles). Además, para mí Truffaut y Rohmer son muy fáciles de ver, no sé, nunca he entendido lo de la hierba; difíciles me parecen Bresson o Godard, por ejemplo, sin que ello impida que también me gusten mucho.
No veo muy claro que siempre se asocie el cine de poesía a Pasolini como dijo el señor Schrader (tampoco lo veo demasiado en Bergman, en todo caso me parece más próximo al ensayo); como yo lo asociaría más a Resnais o al gran Tarkovski.
Por cierto, muy bien empleado lo de "pelis" con Rohmer, que siempre me ha parecido muy palomitero: espero su próxima peli como otros esperan anillos y galaxias ;)

Y una última reflexión. Me da la impresión de que los autores europeos raramente decepcionan, casi siempre ofrecen algo muy parecido a lo que esperas de ello, quizás por trabajar con más independencia y control sobre sus producciones. Con los clásicos americanos, por ejemplo, hay películas de un mismo autor que me gustan mucho y otras muy poco (Hawks, sin ir más lejos), y esto puede que se deba a que sus películas dependen de más gente y de más circunstancias. Esto no quiere decir que los desmerezca en nada; de hecho, me parece mucho más meritorio: desde aquí reivindico, como hizo Jean Eustache, el poder de la artesanía en el cine.

Gracias por vuestros jugosos comentarios!!
Saludos!!

Daniel Quinn dijo...

De nada Ramón!!
Está genial, eres es rey del cartelismo. No sé si a lo que te refieres del subtítulo es a que se corta la foto de la cabecera. Si es así prueba a redefinir el tamaño de la misma. No sé si te vendrá en píxeles, com la mía, pero en ese caso mira el tamaño de la foto y en la plantilla lo cambias (o si sólo te sale la anchura añádele la altura).
Saludos!!

David Cotos dijo...

El amante de las mujeres es una buena película. Sin embargo Truffaut hizo la saga de Antoine Doinel, miralas todas. Truffaut desde mi particular punto de vista es el más grande director que hablo del amor desde todos los puntos de vista.

Roberto A. O. dijo...

Hombre HieronymusMerkin, supongo que debes ser consciente de la generalización que propones. Eso de afirmar que el cine europeo es más poético o reflexivo, bueno, puede que lo aparente o lo busque más intencionadamente, pero nada más lejos de la realidad. No hay nada más poético que "El hombre que mató a Liberty Valance", y es un western. El romanticismo de Borzage para mi es dificilmente superable, salvo en el caso de Murnau. La elevada dramaturgia y marcada tensión de los melodramas de Douglas Sirk ha sido copiada por numerosos cineastas europeos. Y es que el hecho de trabajar en un sistema de estudios tan férreo ha llevado a los "autores" norteamericanos a buscar otras vías para descargar su visión del mundo, su necesidad de explicitar su filosofía de la vida les obliga a narrar historias "encubiertas" dentro de esos géneros tan estereotipados.

Hay estampas tan artísticas como el final de "Los violentos años 20"; reflexiones sobre la condición humana tan profundas (y a la vez mostradas de manera tan sencilla) como "El increible hombre menguante"; historias de "amor fou" tan intensas como "Gun Crazy"; y bueno, si hablamos "cine underground" de Cassavettes y Mekas ni te cuento.

Pero vamos, como dice Daniel, lo importante es (dentro de los gustos personales) disfrutar de todo ese cine tan distinto y tan rico.....y es que hay tantas cosas por ver!!!!

Saludos

HieronymusMerkin dijo...

Claro que hay ejemplos de cine americano cargado de poesia, eso es innegable. Yo estaba generalizando (con el peligro que ello implica). Me has puesto ejemplos de películas americanas de corte poetico o romanticista.
Yo te puedo poner como ejemplos europeos, "0rfeo" o "La bella y la Bestia", de Jean Cocteau, que es poesia pura. O "L´Atalante", de Vigo. Y el caso del expresionismo alemás es elocuente,porque creo que es el ejemplo mas claro de subordinación del fondo a la forma. Tambien ocurrió en España.Por ejemplo, Carlos Saura con "La caza" hace un ejercicio de introspección y lirismo excepcional. Y no hablemos de otros autores como Antonioni, con "El desierto Rojo", por ejemplo.
Lo que quiero decir con todo esto es que en EEUU nos podemos encontrar con películas muy artísticas (en el sentido mas poetico del termino), pero siempre, o casi siempre, tienen una trama concreta y sólida que las apoya. Y eso en Europa no siempre pasa. No se si es porque hay una mayor libertad creativa o porque. Pero en el cine europeo abundan las películas en las que "no pasa nada o casi nada". Me remito, por ejemplo, de nuevo a "El desierto rojo". Lo que cuenta esa película es menos importante que el como lo cuenta. Por eso digo que igual el cine europeo es mas reflexivo, y no necesita apoyarse tanto en una trama concreta.
Es por ejemplo como "El innombralbe" o "Malone muere", de Beckett, por cambiar de arte. Es introspección pura y dura, como quizás "Hiroshima, mon amour", por poner un ejemplo. Y creo, sinceramente, que esos ejercicios de introspección no se dan en el cine americano, y si se hace, es con cuenta gotas (que yo recuerde ahora, "Johnny cogió su fusil",las películas de Morrisey, como "Heat", "trash", etc, "Cabeza borradora",... ahora no se me vienen mas ejemplos a la cabeza, aunque sin duda los habrá).

Pero, que conste, con esto no quiero menospreciar al cine americano, en absoluto. Solo creo que el cine europeo (generalizando) tiene unas características distintas, que lo hace distinto al americano (o al menos así a sido hasta la fecha).

Bye!

****Hieronymus Merkin****

Anónimo dijo...

Claro que hay ejemplos de cine americano cargado de poesia, eso es innegable. Yo estaba generalizando (con el peligro que ello implica). Me has puesto ejemplos de películas americanas de corte poetico o romanticista.
Yo te puedo poner como ejemplos europeos, "0rfeo" o "La bella y la Bestia", de Jean Cocteau, que es poesia pura. O "L´Atalante", de Vigo. Y el caso del expresionismo alemás es elocuente,porque creo que es el ejemplo mas claro de subordinación del fondo a la forma. Tambien ocurrió en España.Por ejemplo, Carlos Saura con "La caza" hace un ejercicio de introspección y lirismo excepcional. Y no hablemos de otros autores como Antonioni, con "El desierto Rojo", por ejemplo.
Lo que quiero decir con todo esto es que en EEUU nos podemos encontrar con películas muy artísticas (en el sentido mas poetico del termino), pero siempre, o casi siempre, tienen una trama concreta y sólida que las apoya. Y eso en Europa no siempre pasa. No se si es porque hay una mayor libertad creativa o porque. Pero en el cine europeo abundan las películas en las que "no pasa nada o casi nada". Me remito, por ejemplo, de nuevo a "El desierto rojo". Lo que cuenta esa película es menos importante que el como lo cuenta. Por eso digo que igual el cine europeo es mas reflexivo, y no necesita apoyarse tanto en una trama concreta.
Es por ejemplo como "El innombralbe" o "Malone muere", de Beckett, por cambiar de arte. Es introspección pura y dura, como quizás "Hiroshima, mon amour", por poner un ejemplo. Y creo, sinceramente, que esos ejercicios de introspección no se dan en el cine americano, y si se hace, es con cuenta gotas (que yo recuerde ahora, "Johnny cogió su fusil",las películas de Morrisey, como "Heat", "trash", etc, "Cabeza borradora",... ahora no se me vienen mas ejemplos a la cabeza, aunque sin duda loo Portugal with me to be my internship colleague, for better or for worse...

Daniel Quinn dijo...

Bienvenido a estos lare David!!
Es cierto que Truffaut es uno de los grandes directores sobre el amor, y eso es algo que se ve en casi toda su obra, Jules y Jim, la saga Doinel, La piel suave..., pero, sobre todo, en dos de sus mejores y más románticamente desesperadas obras: Las dos inglesas y el amor y La mujer de al lado.
Sólo me queda un Truffaut por ver, La historia de Adela H., que la tengo grabada, pero pensar que no podré ver nada más de él me revuelve las tripas y me hace retroceder, jeje.

Con lo del cine europeo y americano hemos entrado en un callejón sin salida; pongamos como nos pongamos vamos a encontrar ejemplos para todo y en cualquier ámbito o lugar, así que será mejor saltar de esta espiral sin fin.
Saludos!!
PD: Cocteau era poeta literalmente, así no vale, jeje ;)